En la reconocida revista Wired hicieron un brevísimo ranking de 5 razones por las cuales los libros electrónicos todavía no estarían listos para explotar completamente. Como nos encantan los rankings, los compartimos acá para hacer lo que más nos gusta: criticarlos.
- Un ebook por la mitad no nos recuerda que tenemos que terminarlo: Dicen en Wired que los libros de papel básicamente “están” en el sentido existencial del verbo. Se apilan en la mesita de luz, se acumulan en el escritorio y si están leídos por la mitad, nos reclaman continuar con la lectura, cosa que los ebooks no.
- No podemos poner todos nuestros ebooks en el mismo lugar: en este punto no me queda más que acordar con los buenos de Wired. En la biblioteca tradicional los libros están acomodados en los estantes de la manera que más nos guste -se escribieron infinitas páginas sobre este tema-. Pero los ebooks los tenemos dispersos aún en el mismo dispositivo, de acuerdo a la tienda donde lo compramos o de acuerdo a la aplicación que tenemos que usar para leer.
- No podemos hacer notas en los márgenes: acá se equivocan. Si bien es “cierto” que no podemos hacer notas en los márgenes, si podemos hacer notas y a mi juicio mejores que las de los márgenes. Ahora nuestras notas están ordenaditas y ancladas al párrafo que deseamos. Además no tenemos que escribir chiquito porque el editor no nos dejó mucha luz.
- Los ebooks se venden como desechables cuando en realidad no cuestan como tales: dicen en Wired que los ebooks no tienen un valor agregado como si tuvieron los DVDs -¿todavía se venden DVDs?- y que sin costo de producción, deberían ser mucho más baratos. Punto parcial, si bien estamos de acuerdo en que deberían ser más baratos, no tienen costo de producción cero. No se gasta en papel e impresión, pero los costos de edición y comercialización siguen existiendo.
- Los ebooks no sirven para decoración de interiores: y acá sí. Acá tienen toda la razón del mundo. Si bien los que tenemos muchos libros, nos quejamos por el espacio que ocupan, no podríamos deshacernos de ellos porque hacen nuestras paredes mucho más bellas. ¿Quién se imagina una habitación adornada con ePubs o con archivos .mobi? Imposible. La industria de la decoración tendrá que dar una respuesta a este problema.